El bisturí piezoeléctrico o ultrasónico nos permite remodelar los huesos del dorso nasal con mucha mayor precisión que con el tradicional cincel, sin romperlos ni dañar los tejidos blandos y ni los vasos sanguíneos circundantes. Por eso la inflamación y aparición de moretones en el posoperatorio son mucho menores comparados con la rinoplastia tradicional.
La rinoplastia ultrasónica es especialmente útil en casos como el de nuestra paciente, cuando existen fracturas o escalones óseos, ya que nos permite ir regularizando las superficies poco a poco hasta dejarlas lisas.
Además cuando realizamos las osteotomías, el piezoeléctrico nos permite realizar cortes en el hueso extremadamente precisos, bajo visión directa, manteniendo intacto el periostio interno que es una capa delgada que recubre el hueso en su parte interna y da gran estabilidad a la nariz.
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